Los niños de otras épocas tenían otras dificultades según el momento de la historia. Los niños de hoy crecen conviviendo con problemas muy duros: pandemia global, amenazas de guerra, apagón estatal, kits de supervivencia, justificación del racismo, fanatismos religiosos… Los jóvenes y los niños se desaniman con estas noticias y ante unas expectativas tan negativas. Ven un mañana incierto. Miran un futuro que se ve muy gris.
A pesar de la realidad inevitable, nuestra responsabilidad es educar a nuestros menores con valores que les ayuden a afrontar la vida. Una buena educación, el esfuerzo, la paciencia, la solidaridad… son parte de una actitud positiva. Cuando vivimos así, la vida se vive mejor y el futuro se ve de color. Como en otras épocas, los niños de hoy afrontan su realidad. Tienen nuestra ayuda. Trabajamos para fortalecerlos. Gracias por apoyarnos.